Hoy en día, la competencia en el sector de Estaciones de Servicio es cada vez más intensa y las exigencias del mercado no dejan de aumentar, es por eso, que las empresas que son administradas por miembros de una familia se enfrentan al desafío de profesionalizar su gestión. 

Acerca del tema, Surtidores LATAM dialogó con Pablo Miguel Cogliati, consultor y asesor especializado en la gestión de negocios familiares en Latinoamérica, quien destacó la importancia de este proceso para asegurar la continuidad y rentabilidad de las actividades.

En primer lugar, sostuvo que una de las claves para el éxito de estas empresas radica en la especialización de las nuevas generaciones. “Pueden aportar mucho al negocio, sobre todo en términos de tecnología y mayor practicidad”, comentó.

Asimismo destacó que mientras que los miembros anteriores solían estar a cargo de todas las áreas del negocio, los jóvenes que toman las riendas hoy tienen la oportunidad de profesionalizar sectores específicos.

“Es fundamental que haya una persona que mantenga una mirada macro, pero también que las partes nuevas se especialicen en áreas claves para adaptarse a lo que exige el mercado”, agregó.

“Hay empresarios preocupados por esa situación y en cómo tienen que encarar el tema para que los hijos sigan con el negocio”, explicó tiempo atrás a este medio Daniel Añon, presidente de la Unión de Vendedores de Nafta del Uruguay (UNVENU) y secretario general permanente de CLAEC. 

En esa línea el especialista quién trabajó con numerosos empresarios del sector minorista de combustibles, mencionó que algunos se involucran mientras que otros no, ya que suele suceder que, desde pequeños, los jóvenes son llevados a la empresa para conocer el trabajo de sus padres. Sin embargo, si un familiar trabaja sin estar motivado o comprometido, puede perjudicarla. 

“Con los nuevos miembros que se incorporan, lo que hay que lograr es que la empresa siga siendo rentable, y además, que pueda incrementar sus ingresos”, resumió Cogliati.