Según el sector privado de los combustibles, el precio de los carburantes fósiles podría aumentar a finales de agosto. 

Debido a una suba de los derivados del petróleo a nivel internacional, las tarifas de las estaciones de servicio paraguayas pueden verse afectadas. Este aumento es resultado de una serie de factores complejos que van desde las tensiones geopolíticas hasta la recuperación económica post-pandemia. 

La nafta la semana pasada cerró a USD 740 el metro cúbico (G. 5.300 por litro) y el gasoil a USD 800 el metro cúbico (G. 5.700), según datos de Petróleos Paraguayos. 

Jorge Cáceres, gerente de Copetrol, expresó a medios nacionales su preocupación ante esta situación y aseguró que el mercado internacional está inestable. 

Debido a estos rumores el viceministro de Comercio, Pedro Mancuello, salió a responder que si bien en el último mes los costos del petróleo aumentaron un 8%, en el último año la tendencia ha sido a la baja en alrededor del 14%. 

“No hay condiciones a corto plazo para que suba el combustible en Paraguay”, afirmó.

Mancuello recordó que el país no es productor de combustibles, sino que se ve obligado a importarlos, aunque por una cuestión de stock las subas no se reflejan inmediatamente, ya que las compras se realizan 45 días antes de que el carburante llegue al país. 

A esto se le suma la promesa política Santiago Peña quien asumirá el 15 de agosto, quien aseguró bajar los costos finales de los combustibles apenas asuma como presidente. El sector se mantiene atento a las novedades que puedan llegar a surgir.