Los estímulos sobre los carburantes habían empezado a disminuir a fines del 2022 ya que los precios venían en descenso a principios de diciembre por una cuestión de expectativas económicas. 

El Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) es un gravamen que se paga por la fabricación y venta o importación de productos. 

De acuerdo con el Servicio de Administración Tributaria, es un arancel indirecto, al igual que el IVA, ya que los contribuyentes no son quienes lo pagan sino que son los clientes a quienes se les extiende el pago, es decir, es un sobrecosto al valor del producto.

Alejandro Montufar, CEO de PetroIntelligence explicó a Surtidores Latam que por cuestiones climáticas y el frío, el precio subió nuevamente incrementando los costos. 

En la primera semana del año el subsidio sobre IEPS fue de 54.8 por ciento, 3.24 pesos por litro. En base a esto desde Petrointelligence se observó que del 7 al 13 de enero la gasolina regular o Magna pasó a un 61.4 por ciento, el equivalente a 3.63 pesos por litro. 

Esto contrasta con los montos que aprobados por Hacienda para la última semana de 2022, donde la ayuda a la gasolina regular fue de 28.7 por ciento o 1.57 pesos por litro. 

En cuanto a la nafta Premium o roja, el estímulo para la segunda semana de enero es de 40.1 por ciento o 2 pesos por litro, mientras que en el primer periodo fue de 29.1 por ciento o 1.45 pesos por litro. 

Aclarado esto, cabe señalar que en los últimos días del año saliente el Gobierno mexicano no otorgó un estímulo fiscal para dicho combustible.

Montúfar, señaló que los incrementos o disminuciones en los estímulos fiscales a los combustibles están relacionados con el comportamiento de los precios internacionales de referencia y que dicha situación continuará mientras continúe el invierno.