Durante el pasado mes de abril, el litoral peruano se vio afectado por una serie de oleajes anómalos que obligaron al cierre de hasta 68 puertos a nivel nacional, según lo dispuesto por la Dirección de Hidrografía y Navegación de la Marina de Guerra del Perú.
Este fenómeno, que duró más de 20 días, interrumpió la operatividad de infraestructuras energéticas del país, lo que generó un aumento de incertidumbre para los empresarios minoristas de grifos y Estaciones de Servicio.Los terminales Multiboyas Negritos y Punta Arenas, además de los muelles de carga líquida y el Muelle Híbrido MU2 de la Refinería Talara, fueron algunas de las instalaciones afectadas.
Petroperú, la empresa estatal que opera la Refinería Talara, anunció una pausa temporal en sus unidades de proceso como medida preventiva. La interrupción y la acumulación de inventarios elevados fueron las razones detrás de esta decisión, la cual fue debidamente notificada a Osinergmin. Esto, si bien no provocó desabastecimiento masivo, aumentó la incertidumbre respecto a la disponibilidad de combustibles en las estaciones más alejadas, que dependen directamente de los puertos para su suministro constante.
Sin embargo, desde la compañía, que gestiona una red de más de 700 Estaciones de Servicio a nivel nacional destacaron que el abastecimiento de combustibles no se vería comprometido, ya que se trabaja en estrecha coordinación con las autoridades marítimas para monitorear las condiciones climáticas.
En este contexto, y como respuesta a dichas situaciones, el Congreso de la República oficializó la creación de la Agencia de Inventarios de Combustibles (AIC) a través de la Ley N.º 32315. Esta nueva entidad privada sin fines de lucro tiene como principal objetivo asegurar la reserva estratégica de hidrocarburos y GLP, promoviendo el suministro continuo de combustibles en el país.
La AIC también gestionará las infraestructuras estatales de almacenamiento de combustibles líquidos, con el fin de fortalecer la capacidad de respuesta ante emergencias.
Según informaron, operará bajo la supervisión de Osinergmin y el Ministerio de Energía y Minas (Minem), y su función será administrar las instalaciones de almacenamiento que no han sido concesionadas ni pertenecen al sector privado.
Cabe mencionar que esta entidad, representará, de acuerdo a lo informado, una gran oportunidad para los empresarios minoristas, ya que asegura que en el futuro, el abastecimiento de combustibles no dependa exclusivamente de la operatividad de los puertos, sino que se cuente con un sistema de reservas que respalde las operaciones de las Estaciones de Servicio ante cualquier emergencia.
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