Vitol desembarcó en Argentina en 1996

Argentina.
1 Dic, 2025
En carrera por la licenciataria de Shell Vitol: el gigante energético que busca dar el salto definitivo en Argentina
Con casi seis décadas de expansión global, presencia logística en el país y un historial de adquisiciones estratégicas, la empresa aparece entre los principales oferentes para quedarse con la refinería y las 850 Estaciones de Servicio que Raízen podría vender en una operación valuada en más de US$ 1.000 millones.

Vitol, uno de los mayores comerciantes de energía del mundo, vuelve a quedar en el centro de la escena del mercado argentino. La compañía neerlandesa —fundada en Róterdam en 1966 y hoy convertida en un actor global con operaciones en 40 países— integra la lista de finalistas en el proceso de venta de Raízen Argentina, que incluye la refinería de Dock Sud y una red de alrededor de 850 Estaciones de Servicio bajo la marca Shell. La operación, que podría definirse en los próximos días, está estimada entre US$ 1.000 y 1.600 millones y se perfila como una de las transacciones más grandes del sector energético local en la última década.

Aunque históricamente discreta, la presencia de Vitol en Argentina no es nueva. La empresa desembarcó en 1996 y desde entonces desarrolló operaciones comerciales y logísticas, con un foco particular en el almacenamiento y la distribución de combustibles. Su activo más relevante en el país es la terminal situada en Zárate, a orillas del río Paraná, administrada por su subsidiaria Vitco S.A. El complejo, con capacidad de almacenamiento de 250.000 metros cúbicos y un muelle apto para buques y barcazas, permite a la compañía recibir productos importados y distribuirlos hacia el mercado interno mediante camiones o embarcaciones. Esa infraestructura logística, sumada a su red global de transporte marítimo, ubica a Vitol en una posición competitiva para ampliar su presencia en el negocio local.

El interés por Raízen representa un salto cualitativo en su estrategia argentina. La refinería de Dock Sud, con una capacidad de procesamiento de 101.000 barriles diarios —la tercera más grande del país—, es el corazón del negocio que la empresa conjunta de Shell y el grupo brasileño Cosan busca desinvertir en medio de un proceso de reordenamiento financiero. Su red de Estaciones de Servicio concentra el 22 por ciento de las ventas de naftas y gasoil de la Argentina, lo que convierte a este paquete en un activo codiciado por los grandes jugadores globales. Vitol compite por ellos con Mercuria Energy Group, otro gigante del comercio de materias primas que también figura entre los finalistas. Ninguna de las partes involucradas hizo comentarios públicos sobre las negociaciones, de carácter privado.

La potencial compra se enmarca en un contexto de cambios regulatorios y económicos en el país. En la primera mitad de su mandato, Javier Milei avanzó en una profunda desregulación del sector energético, eliminando controles sobre los precios del crudo y los combustibles, lo que alentó a compañías internacionales a revaluar sus estrategias en el mercado argentino. Para Vitol y Mercuria, consolidar activos de refinación en un país productor de hidrocarburos representa una oportunidad para fortalecer su presencia en un negocio que combina procesamiento, logística y comercialización minorista.

En el caso particular de Vitol, el interés se explica por una trayectoria marcada por la expansión a través de adquisiciones estratégicas. En los últimos años, la empresa compró participaciones en distribuidoras de combustibles en Sudáfrica y Turquía, además de avanzar sobre una refinería de exportación en Italia. También participó en la puja por los activos vinculados a Citgo en Estados Unidos, en un proceso judicial de alto perfil. Estas operaciones evidencian su estrategia de integrar cada vez más partes de la cadena de valor energética para consolidar retornos en un mercado global volátil.

La posible adquisición de Raízen Argentina sería coherente con esa lógica. Integrar una refinería y una red de estaciones le permitiría a Vitol completar el circuito de importación, almacenamiento, procesamiento y venta minorista, un salto que modificaría su rol en la Argentina de manera sustancial.

El interés creciente de traders como Vitol y Mercuria por activos de refinación no es casual. La crisis energética global desatada tras la invasión rusa a Ucrania generó ganancias extraordinarias para estas firmas, que ahora buscan activos físicos para sostener su rentabilidad a largo plazo. Las refinerías, puertos y redes de expendio ofrecen un flujo más estable que las operaciones exclusivamente comerciales, sujetas a la volatilidad de los precios internacionales.

Etiquetas de la nota: combustibles | estaciones de servicio | shell

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Seguir Leyendo

Síguenos
en nuestras redes