La transición energética avanza a distintas velocidades en la región, pero para algunos empresarios del sector de combustibles ya dejó de ser una simple aspiración y se convirtió en una apuesta concreta. Ese es el caso de Javier Vargas Becerra, quien compartió con Surtidores LATAM su experiencia implementando paneles solares en su estación de servicio.

En primer lugar, explicó que se trata de un proyecto que no solo fue exitoso, sino altamente rentable. Vargas recordó que todo comenzó cuando el gobierno colombiano, impulsó políticas para fomentar la eficiencia energética, incluyendo incentivos para la adopción de paneles solares. “Salió la norma donde ofrecían incentivos tributarios y arancelarios. Nosotros lo evaluamos y decidimos implementarlo”, explicó.

La propuesta era clara: modernizar la Estación de Servicio y reducir al máximo los costos energéticos. La instalación no fue un experimento a medias. El empresario decidió que el 100% de la demanda energética de la estación sería atendida con energía solar.

Para ello, optaron por un sistema conectado directamente a la red, lo que permitió un mecanismo de intercambio: durante el día, la Estación de Servicio entrega excedentes solares a la red; durante la noche, recupera esa energía. “La idea es que al final la conciliación tienda a cero. Así la factura de energía prácticamente desaparece”, detalló.

El resultado sorprendió incluso a quienes seguían el proyecto de cerca. Vargas señaló que alcanzaron una rentabilidad del 60% desde la puesta en marcha del sistema, hace ya cuatro años. Los ahorros en la factura eléctrica son hoy “totalmente representativos”, al punto de haber recuperado la inversión en un periodo menor al anticipado.

Una de las inquietudes más frecuentes entre los empresarios es si este tipo de transformación afecta las operaciones diarias. En su caso, asegura que no hubo ningún impacto perceptible. “No cambió nada. En la parte operativa no se siente ninguna diferencia”, afirmó. Los clientes tampoco notaron la transición: la Estación de Servicio funciona exactamente igual, solo que ahora se alimenta de una fuente limpia y económica.

Consultado sobre si recomendaría la tecnología a colegas del sector, Vargas no dudó: “Sí, sin duda lo recomiendo”. Para él, la clave está en aprovechar los incentivos disponibles, hacer una evaluación técnica adecuada y tomar la decisión con visión a largo plazo. El retorno, insiste, está más que comprobado.

El empresario incluso se entusiasmó con que más Estaciones de Servicio adopten este camino. “Sería interesante que otros colegas desarrollaran proyectos similares”, afirmó.

«El cambio no solo es beneficioso individualmente, sino que podría contribuir a una transformación más amplia del sector, haciéndolo más competitivo y alineado con las nuevas tendencias energéticas«, concluyó Vargas Becerra.