En estas últimas décadas México ha decidido tomar una serie de medidas para reducir la exposición de los ciudadanos a un ambiente contaminante y así disminuir la generación de emisiones dañinas. 

En diálogo con Surtidores Latam, Xavier Mota, director general de la empresa Construcciones California S.A de C.V, ha compartido las claves de esta disyuntiva y cómo a través de la aplicación de un sistema han logrado mejorar las condiciones atmosféricas. 

Cabe destacar que la empresa dirigida por Mota, está dedicada a la instalación, mantenimiento y sistemas de recuperación de vapores en todo el país. Además posee la tecnología con más certificaciones en California, Estados Unidos, líder mundial en sistemas de recuperación de vapores.

El mismo declaró: “Llevamos unos 28 años instalando el sistema de recuperación de vapores en el país, ya que en 1995 la ciudad de México estableció una ley para la colocación del mismo debido a los altos índices de contaminación que había en la región”, señaló. 

Asimismo, explicó que las leyes de normatividad fueron ampliándose, extendiendo las zonas en donde se debían implementar este sistema, abarcando alrededor de 2700 Estaciones de Servicio comprendiendo ciudad de México, Guadalajara, Monterrey, Tijuana, Ciudad Juárez y regiones que se encuentran cercanas a refinerías. 

“Cuando uno recarga un vehículo, el tanque larga vapor de gasolina, esto produce que al echar el combustible este gas sale a la atmósfera y esta sustancia en combinación con los óxidos de nitrógenos forman contaminantes llamados ozono. En varias zonas del país el ozono es muy dañino, ya que si uno lo respira es perjudicial y afecta al medio ambiente”, manifestó. 

El ozono es un contaminante que causa varios problemas, ya que forma parte del smog fotoquímico y la lluvia ácida. Lo que produce el sistema de recuperación de vapores es evitar el contacto del nitrógeno con los rayos solares interrumpiendo el proceso de creación del gas contaminante. 

Mota explicó que las autoridades han determinado las zonas más contaminadas del país, y han desarrollado normatividades que obligan a las Estaciones de Servicio a instalar estas maquinarias. Cada 20 litros de combustible se generan 20 litros de vapor a la atmósfera y gracias a la recuperación de vapores se evita que estos gases se esparzan.