La región de Huánuco enfrenta una situación crítica debido a las intensas lluvias y huaicos que han dañado diversas infraestructuras y comunidades en los últimos días. Este fenómeno, originado por las lluvias continuas y la activación de quebradas, dejó a su paso un rastro de barro y escombros que dificultan el acceso a varios lugares. 

De acuerdo a lo informado, ante esta emergencia, el Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osinergmin) se encuentra realizando la supervisión de infraestructura eléctrica y de las Estaciones de Servicio, con el fin de asegurar la seguridad y la disponibilidad de combustibles esenciales para la población afectada.

Por su parte, el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) advirtió durante las últimas horas que las lluvias en Huánuco continuarán en los próximos días, lo que podría agravar la situación en la región. De hecho, el pronóstico indica que las precipitaciones acumuladas ya representan la mitad de lo esperado para todo el mes de noviembre.

En tanto, las acciones de Osinergmin en Huánuco se centran en la revisión y monitoreo de las Estaciones de Servicio, buscando posibles daños en sus infraestructuras debido a los deslizamientos y a la acumulación de agua en las instalaciones, lo que podría afectar los tanques de almacenamiento y otros equipos sensibles. 

Cabe mencionar que en ese sentido, hasta el momento, no se han reportado grandes incidentes ni tampoco han sufrido daños las plantas envasadoras de gas, las cuales continúan operando con normalidad y asegurando el abastecimiento en la región.

La comunidad de Amarilis, una de las más afectadas, fue testigo de cómo el barro y los escombros han bloqueado carreteras y dificultado el acceso a zonas rurales. Es por ello que la maquinaria pesada ha sido desplegada para restaurar caminos, mientras que las autoridades se esfuerzan por asegurar la evacuación de aquellos en riesgo. 

Ante este panorama, su alcalde y otras autoridades locales han solicitado ayuda urgente del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) y del Ejército, que ya colaboran en la evacuación de familias en las zonas más vulnerables. En paralelo, las autoridades locales están trabajando en planes de contingencia que incluyen la limpieza de los puntos afectados y el envío de ayuda humanitaria una vez que disminuyan las lluvias.