Al igual que sucede en otros países, la zona fronteriza entre Colombia y Venezuela es una región de actividad económica y social intensa, marcada por el intercambio constante.

Cabe mencionar que puntualmente la gasolina en el vecino país tradicionalmente es una de las más baratas del mundo. A pesar de los problemas económicos, el precio del combustible mantiene una gran diferencia con respecto al precio local.

Al respecto, Surtidores LATAM dialogó con María Eugenia Martínez, directora ejecutiva y asesora jurídica de la Asociación de Estaciones de Servicios de Norte de Santander (ASESNORT), quién compartió sus perspectivas sobre cómo esta situación afecta a la economía y a las Estaciones de Servicio de la zona.

En primer lugar, la referente explicó que la ubicación del Norte de Santander, justo en la frontera con Venezuela, expone a la región a una serie de problemas relacionados con el contrabando de energéticos.

En ese sentido agregó: “La mayoría de personas cuentan que el combustible es de muy mala calidad y que está dañando bombas de inyección, etc”. A pesar de esto, la diferencia de precios sigue siendo un gran incentivo para quienes buscan ahorrar.

Asimismo, Martinez mencionó que durante el último proceso electoral llevado a cabo en Venezuela, se observó un aumento en las ventas de gasolina en las Estaciones de Servicio locales.

“Con las elecciones del 28 de julio, se nos incrementó un poquito la venta de gasolina porque no podían pasar hacia allá, pero fue por unos días porque ya volvimos a lo mismo”, sostuvo la directiva de ASESNORT.

Finalmente, Martínez reconoció los desafíos de controlar el contrabando de combustible. “No es que haya pimpineros en las calles de Cúcuta, eso no está pasando. Es muy difícil que las autoridades aquí pongan sus equipos móviles a mirar cómo se está taqueando”, resumió Martínez.