Aunque el gobierno nacional expresó su interés en fomentar la electromovilidad a través de políticas de apoyo, estas medidas aún están en desarrollo y podrían no ser lo suficientemente fuertes para impulsar una adopción masiva.
Acerca del tema, Surtidores LATAM dialogó con Adolfo Rojas, presidente de AEDIVE-PERÚ, Asociación de Emprendedores para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico, quien se refirió al estado actual y el futuro de esta iniciativa.
En primer lugar, el directivo resaltó la necesidad de políticas gubernamentales sólidas que fomenten la transición hacia la electromovilidad. El referente sugirió que se deben implementar incentivos fiscales y arancelarios para hacer que las unidades sean más accesibles y atractivas para los consumidores.
Asimismo destacó la importancia de la infraestructura como una pieza importante para impulsar la adopción masiva de vehículos eléctricos en el Perú. En ese sentido, señaló que la falta de una red de Estaciones de carga accesibles es uno de los principales obstáculos que deben superarse.
“Es como el dilema entre el huevo y la gallina, primero pongo los cargadores para que ahí la gente se anime y comience a comprar vehículos eléctricos y pueda andar por las calles y circular sin ningún problema. O lo otro, que haya oferta y que bajen los precios para que de ahí venga la infraestructura”, sostuvo Rojas.
“La realidad de otros países nos indica que quienes han desplegado primero los puntos de carga, como son España, Chile, Colombia, etc, hoy tienen un número de unidades mucho más grandes que el resto”, afirmó el especialista.
En esa línea argumentó: “El objetivo es que el gobierno tiene que plantearse una política para que haya un desarrollo de infraestructura. Es como poner Estaciones de Servicio por todos lados para que un vehículo eléctrico pueda desplazarse sin ningún inconveniente. O sea, no necesariamente tener que llegar a tu casa con una ruta planificada para cargarlo, salir al otro día y regresar”
“No queremos que los peruanos se sientan limitados en hacer un desplazamiento. Si no tenemos esa libertad de poder estar movilizándonos abiertamente con el vehículo eléctrico, no nos va a quedar otra forma que planificar viaje. Es decir, voy al trabajo, al súper y ya no puedo hacer más porque tengo que regresar a mi casa, cargar y entonces ya se te pasó todo el día”, resumió Rojas.
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