En la jornada de debate organizada por este medio en el cual asistieron numerosos operadores de combustibles, referentes del sector del GNC dieron su parecer y proyecciones sobre el gas vehicular para camiones y buses como una verdadera opción de rentabilidad para las bocas de expendio.

Lucas Woinilowicz, gerente de Desarrollo de Negocios de Scania Argentina, Ignacio Barousse, gerente de Proyectos Gasener SRL y Martín Lapenta, responsable de Ventas GNV y Marketing de AGIRA, compartieron sus perspectivas sobre esta transición energética clave.

En primera instancia, Barousse señaló con optimismo que Argentina cuenta con todas las condiciones necesarias para que el GNC experimente un crecimiento significativo. Enfatizó la abundancia de recursos de gas natural en el país, la capacidad comprobada para producirlo a precios competitivos y una infraestructura establecida de más de 2 mil estaciones de carga.

Destacó también la historia de 40 años de la industria del GNC en Argentina y los beneficios económicos y ambientales que su expansión puede ofrecer, como la reducción de la dependencia de combustibles líquidos y la disminución de emisiones de carbono.

Además, Barousse subrayó el aumento en el número de conversiones a GNC y la oportunidad que representa el transporte pesado para las Estaciones de Servicio, especialmente en un contexto donde la demanda de naftas está disminuyendo.

A su turno, Lucas Woinilowicz, como referente de los fabricantes de camiones, enfatizó la importancia de la colaboración entre diferentes actores del sector para impulsar la adopción del GNC en este ámbito.

Destacó el compromiso de Scania Argentina en trabajar con las Estaciones de Carga y demás actores para promover esta nueva tecnología, que no solo ofrece beneficios ambientales sino también oportunidades de negocio significativas. El ejecutivo describió cómo cada camión convertido a GNC representa una posibilidad de incrementar las ventas en los surtidores en un 50 por ciento, lo que subraya el potencial de crecimiento para los operadores.

Después fue Martín Lapenta, quien resaltó la disponibilidad de infraestructura ociosa en las Estaciones de Servicio y la ocasiónd que representa el GNC en el transporte pesado para aumentar los ingresos de las Estaciones de Servicio. En ese contexto, explicó como una inversión relativamente pequeña en equipamiento que puede llevar a un aumento significativo en los volúmenes de despacho.

También, en coincidencia con  Woinilowicz, ponderó la necesidad de adaptar la normativa para permitir la coexistencia de surtidores de gasoil y GNC en las mismas islas de carga, un desarrollo que ya está siendo probado en una operadora de la localidad bonaerense de Zarate.

Los especialistas coincidieron finalmente en que con una combinación de recursos naturales, infraestructura establecida y colaboración entre diferentes protagonistas de la actividad, el país está bien posicionado para liderar la transición hacia un transporte más sostenible y rentable como lo es el GNC.