Desde los últimos días, el país vive un panorama devastador debido a las intensas lluvias que azotaron varias regiones del país, como Bogotá, La Guajira y Chocó. Cabe recordar que el presidente Gustavo Petro declaró una situación de desastre natural a nivel nacional, tras las inundaciones, deslizamientos de tierra y daños materiales.

Según la directora del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), Ghisliane Echeverry, los aumentos en los caudales de los ríos han desatado 198 alertas, de las cuales 33 son de nivel rojo, lo que implica un alto riesgo de crecientes súbitas. 

Las autoridades meteorológicas prevén que este fenómeno continuará durante los próximos meses, con lluvias que podrían extenderse hasta diciembre, afectando especialmente las regiones Andina, Pacífica y Caribe.

En respuesta a esta situación, desde Esocol Colombia, la Asociación de Estaciones de Servicio del Oriente Colombiano, quienes están afiliados  a la Confederación de Distribuidores Minoristas de Combustibles y Energéticos de Colombia (COMCE), emitieron una serie de recomendaciones claves para las Estaciones de Servicio, con el fin de proteger tanto a los empleados y la infraestructura como a la comunidad.

En primer lugar, una de las sugerencias más urgentes es el monitoreo constante del tendido eléctrico dentro y alrededor de las Estaciones de Servicio ya que se pueden generar cortocircuitos y otros accidentes relacionados con la electricidad, por lo que los propietarios y administradores deben asegurarse de que sus instalaciones estén libres de riesgos.

Además, destacaron la importancia de mantener las alcantarillas y los caños circundantes limpios y en buen estado. Estos sistemas de drenaje son fundamentales para evitar el taponamiento, lo que puede provocar inundaciones dentro de las gasolineras y en sus alrededores.

Por otro lado, recomendaron que los empresarios del sector minorista de combustibles también estén atentos a los niveles de aguas vecinas ya que la rápida difusión de esta información puede salvar vidas y minimizar los daños materiales.

Otra recomendación clave es tener a la mano los números de emergencia, como los de los bomberos, la defensa civil y la Cruz Roja y mantenerse informados sobre las alertas tempranas emitidas por las autoridades locales y el Ideam.