Raizen Argentina se prepara para marcar un nuevo hito en el sector de expendio de combustibles con el próximo lanzamiento de su primera Estación de Servicio bajo la modalidad de autodespacho. La iniciativa surge a partir de la reciente reglamentación de esta práctica por parte de la Secretaría de Energía de la Nación, lo que abrió la puerta para que las principales compañías del rubro comiencen a experimentar con alternativas más ágiles y modernas de atención al público.

El primer establecimiento adaptado se ubica en un punto neurálgico de la Ciudad de Buenos Aires, en la intersección de la Avenida Córdoba y calle Salguero, donde ya se están llevando a cabo las obras necesarias para poner en marcha el piloto en el corto plazo. Este proyecto representa un paso estratégico en la búsqueda de nuevas soluciones que respondan a las tendencias de digitalización y autoservicio que marcan el pulso de los hábitos de consumo actuales.

Si bien en una primera etapa, la implementación de esta modalidad se enfoca dentro de la Capital Federal, la compañía adelantó a surtidores.com.ar que prevé extender el sistema a otras provincias a medida que las regulaciones locales lo permitan. La expansión será gradual y priorizará aquellas jurisdicciones que ya han habilitado el servicio de carga de combustible sin intermediarios.

La adecuación de las estaciones para ofrecer este nuevo formato requiere de una serie de modificaciones específicas. En las islas de carga, se instalarán pantallas de contacto táctil que permitirán al usuario interactuar directamente con el surtidor, seleccionar el tipo de combustible y procesar el pago de manera autónoma. Asimismo, se incorporará nuevo mobiliario que albergará los dispositivos de pago y facturación, además de canales de comunicación directa con la tienda o el personal en caso de cualquier inconveniente o consulta.

Otro de los aspectos técnicos que implica el desarrollo del autodespacho es la adaptación de los sistemas operativos, de modo que se garantice el cobro anticipado de la transacción antes de proceder a la carga del combustible, asegurando así una operatoria segura y controlada. A nivel físico, también se requerirán leves modificaciones en las mangueras y los picos de carga, cumpliendo estrictamente con los requisitos de seguridad dispuestos por la normativa nacional.

Respecto a las expectativas de la empresa sobre la aceptación del nuevo sistema entre los consumidores, desde Raízen consideran que la modalidad tendrá una buena recepción, particularmente entre los segmentos más jóvenes del mercado. Estos perfiles de usuarios, familiarizados con el uso cotidiano de tecnologías digitales, valoran la rapidez, la autonomía y la facilidad en los procesos de compra, características que el autodespacho viene a potenciar dentro de la experiencia de cargar combustible.

No obstante, también prevén que el “self service” puede captar la preferencia de un público más amplio que busque opciones ágiles y eficientes, especialmente en horarios de baja demanda o para quienes priorizan la inmediatez en sus actividades cotidianas. El nuevo sistema ofrecerá la posibilidad de completar una carga de combustible de forma sencilla, pero sin renunciar al asesoramiento de un vendedor de playa cuando sea necesario, ya que habrá personal disponible para atender cualquier requerimiento adicional.

Desde el punto de vista del negocio, la introducción del autodespacho representa una herramienta valiosa para optimizar la operación de las Estaciones de Servicio. Al mejorar la eficiencia en turnos de menor afluencia de clientes, el sistema podría permitir que estaciones que hoy permanecen cerradas durante la noche por cuestiones de seguridad puedan mantenerse operativas.

Finalmente, y consultados sobre si el autoservicio traerá aparejado un diferencial en el precio del combustible, desde la empresa aclararon que no necesariamente habrá cambios en los valores actuales.