La firma argentina Sifer Gas, anunció la puesta en marcha del primer plan de oferta masiva de un novedoso kit de instalación que permitirá a los camiones y buses actualmente impulsados a gasoil, utilizar también gas licuado para su funcionamiento.

Luego de que culminara con éxito el período de pruebas y controles necesarios para concretar el proyecto de impulsar la movilidad de vehículos pesados con gas licuado de petróleo, desde la firma adelantaron a surtidores.com.ar que ya están ofreciendo al público en general y a las empresas de logística planes de financiamiento y promociones de ofertas para instalar el equipo de GLP en sus unidades.

“Comprobamos experimentalmente en uno de nuestros camiones con motor Scania diésel, el funcionamiento y rendimiento del equipo de GLPA, con resultados que rondan un 45 por ciento de ahorro y mejora de autonomía”, dijo a este medio Raúl Persoglia el titular de Sifer Gas, empresario que posee una larga trayectoria en la conversión de automóviles y propietario de una red de Estaciones de Servicio para la recarga de dicho combustible en las regiones del Norte y Cuyo del país.

El equipo, explica Persoglia, opera de manera “híbrida”, utilizando ambos combustibles a la vez. Consta de cuatro tanques que cargan 100 litros cada uno y asegura que tiene una autonomía 2340 km reemplazando el 42 por ciento del diesel por GLPA.

ECONOMÍA CIRCULAR PARA EL FINANCIAMIENTO DE EQUIPOS

En otro orden de cosas, Persoaglia comentó que se encuentra activo un nuevo programa de financiamiento de las conversiones en los automóviles impulsados a GLPA cuya instalación se haya realizado en los talleres propios de la firma.

A través de un chip de información, cuando el sistema detecta que la unidad cuenta con un conversor provisto por Sifer Gas, automáticamente le cobra al titular del rodado un 50 por ciento más al precio de la carga, para que esa diferencia se aplique al plan de pagos de manera de amortizar el costo de la instalación.

Persoaglia adelantó que la operatoria estará en un futuro disponible también para la conversión de los motores diésel en vehículos pesados.