Tal como fue informado por Surtidores, la empresa DUCSA adjudicó el 70 por ciento del envasado de sus garrafas a MEGAL, mientras que el restante 30 por ciento fue acordado con Acodike. RIOGAS por su parte, no se presentó al llamado.
A poco de conocerse el resultado de la licitación, RIOGAS dio su versión sobre el tema, argumentando “cláusulas inusuales”, al tiempo que advirtió que el nuevo esquema de envasado que se pondrá en marcha con la vigencia de los nuevos contratos a partir del 1° de marzo, “podría generar pérdidas económicas a su controlante ANCAP”.
La empresa aclaró en el mismo documento que al comienzo del proceso en 2022, se presentó una objeción formal al contenido del pliego de la que no obtuvo respuesta, razón por la que optó no presentarse.
INUSUALES E IMPROCEDENTES
Cláusulas consideradas “inusuales, improcedentes e inconvenientes”, entre otras cuestiones como obligaciones para el envasador “con garantías y penalidades desproporcionadas” son algunas de las razones esgrimidas por RIOGAS.
Además, la firma cuestionó que en la licitación quedaba de manifiesto que la distribuidora tenía potestad de control “en cuestiones propias de la organización del trabajo y la operativa del envasador”.
ANCAP PIERDE
Según RIOGAS, el nuevo esquema de envasado de DUCSA que comenzará el próximo 1ro, de marzo, supondría “pérdidas para ANCAP”, ya que de acuerdo con el texto de los nuevos contratos regulatorios del sector del supergas, el costo del arrendamiento es por “tonelada envasada”.
Al respecto, fuentes de ANCAP consultadas por Surtidores desmintieron categóricamente la versión de RIOGAS. “Es exactamente al revés, con la licitación y el nuevo sistema que se pondrá en práctica en unos días, DUCSA contratará el envasado a un menor precio por la recarga de sus garrafas, lo que redundará en un ahorro para la S.A. propiedad de ANCAP”, afirmaron.
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