Mientras que en otros países de Latinoamérica se mezcla el bioetanol en las gasolinas al 10 por ciento, México continúa con 5.7 por ciento y su producción es incipiente.

En este sentido, Galo Galeana Herrera, coordinador general de la Asociación para la Movilidad con Biocombustibles en México, aseguró en Expogas Monterrey que a nivel mundial la tendencia es ya un E10, y que en el país azteca existe una oportunidad enorme para producir bioetanol a base de caña de azúcar.

El experto participó en la conferencia «Las ventajas de incluir bioetanol en la matriz energética nacional» y explicó que diariamente se utilizan alrededor de 800 mil barriles de gasolinas en el país, y que de darse la autorización de un E10 en México se necesitarían 80 mil barriles de bioetanol. Sin embargo, la realidad es que a lo mucho se producen unos mil barriles.

Mencionó que de establecerse un E10 en el país, esto le daría mayor certidumbre a las inversiones, a los productores, a los ingenios y podría detonar un cambio en la producción de azúcar.

Relató que existe una oportunidad ya que actualmente existe un mal precio a nivel internacional porque se está saturando el mercado y se está consumiendo menos caña. 

Por lo tanto, para este sector, aprovechar esta materia prima para producir bioetanol es la vía alterna adecuada, aseguró el experto, pero para lograrlo se requiere de voluntad política.

«El E5.7 (nivel actual aprobado en México), es muy bajo; pero el 10 por ciento (E10) detona los beneficios», concluyó.