Imaginar una Estación de Servicio sin una tienda de conveniencia, una cafetería o incluso un servicio de mantenimiento exprés resulta cada vez más difícil. En un sector donde la rentabilidad ya no depende exclusivamente de la venta de combustibles, la diversificación se ha convertido en una necesidad.
En este contexto, el modelo de franquicias aparece como una estrategia clave para ampliar la oferta de servicios y mejorar la eficiencia operativa.
Carlos Canudas Rivell, consultor internacional especializado, explica que este modelo se basa en «un contrato en el que una empresa con un negocio probado y una marca reconocida otorga a otra el derecho de comercializar sus productos o servicios dentro de un territorio y bajo ciertas condiciones comerciales«.
Sin embargo, en diálogo con surtidores.com.ar, aclara que los contratos de distribución que las petroleras establecen con las Estaciones de Servicio, aunque similares en algunos aspectos, no pueden considerarse franquicias.
¿Qué ventajas ofrece este esquema? En primer lugar, permite minimizar riesgos operativos, ya que el franquiciante aporta su experiencia y estándares de calidad probados. A su vez, otorga acceso a una red consolidada de marketing y asistencia técnica. No obstante, Canudas advierte que «el éxito no está garantizado«.
Para funcionar correctamente, la estación debe adaptarse a la filosofía y operación de la marca, además de asumir costos como derecho de entrada, regalías y contribuciones a fondos de marketing.
FACTORES CLAVES PARA ELEGIR UNA FRANQUICIA
Antes de tomar la decisión es fundamental considerar ciertos aspectos: si se opera bajo la bandera de una petrolera, es necesario obtener su autorización para incorporar una marca.
En cambio, para aquellas de bandera blanca, la elección es más flexible, aunque igualmente es recomendable optar por franquicias con un nivel de reconocimiento similar o superior al de la estación.
Otro punto clave es la viabilidad financiera. «El análisis de rentabilidad se realiza a través del ‘recupero de inversión’, que compara la inversión inicial con el flujo de ingresos y egresos proyectado«, señala Canudas.
En este sentido, el franquiciante suele realizar estudios de mercado para estimar el volumen de ventas en la zona y calcular el período de retorno del capital invertido.
LA DIVERSIFICACIÓN COMO ESTRATEGIA DE CRECIMIENTO
Si bien la incorporación de franquicias gastronómicas en Estaciones de Servicio es una práctica habitual, existen muchas otras opciones que pueden contribuir a mejorar la experiencia del cliente y generar nuevas fuentes de ingreso.
Las alternativas son variadas: desde minimercados y cafeterías hasta servicios de lavandería, lavaderos de mascotas e incluso pequeños parques infantiles.
«En todas estas actividades hay marcas que franquician su negocio, permitiendo a los estacioneros ampliar su oferta y captar un público más diverso«, afirma el especialista.
Asimismo, la gestión eficiente del inventario es otro aspecto fundamental, por lo que Canudas aclara que los franquiciantes proveen manuales detallados con puntos de reabastecimiento predefinidos, ya que «un cliente atribuye la falta de stock a la marca en su conjunto, no al franquiciado».
Por ello, el cumplimiento de los estándares de abastecimiento es clave para mantener la confianza del consumidor.
CALIDAD DEL SERVICIO Y ADAPTACIÓN A NUEVAS TENDENCIAS
Para garantizar un servicio uniforme en toda la red, las franquicias establecen rigurosos sistemas de control. Mediante auditorías periódicas, se evalúa el desempeño de cada punto de venta, aplicando incentivos o sanciones según corresponda.
«Este sistema no solo protege a la marca, sino también a la red de franquiciados, ya que un mal desempeño de uno puede afectar a todos«, destaca el consultor.
Por otro lado, la sostenibilidad y la responsabilidad social empresarial juegan un papel cada vez más importante. En este sentido, las marcas franquiciantes establecen estándares ambientales y sociales que sus franquiciados deben cumplir, teniendo en cuenta que el estacionero puede hacer más, pero nunca menos de lo estipulado.
Mirando hacia el futuro, Canudas sostiene que el modelo de franquicias seguirá evolucionando para adaptarse a las nuevas tendencias del mercado.
Para los propietarios de Estaciones de Servicio que buscan ampliar su rentabilidad y mejorar su competitividad, el modelo representa una oportunidad interesante. “No obstante, antes de tomar una decisión, es fundamental analizar la propuesta de valor, evaluar los costos asociados y asegurarse de que la marca elegida cuente con el respaldo y reconocimiento necesario”, expresa el consultor.
Por último, el referente destaca que existe la posibilidad de incorporar una franquicia sin operarla directamente y comenta que «el estacionero puede permitir que un tercero instale y administre una franquicia en su estación, generando ingresos adicionales mediante alquileres«.
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