En el marco de un proceso de cambios en el sector energético mexicano, la extinción de siete organismos autónomos se discutirá este mes en el Congreso. Esta medida, que podría culminar en la eliminación parcial de la autonomía de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), marca un rumbo hacia una mayor centralización del control energético en el gobierno federal.
En conversación con Surtidores Latam, el especialista en regulaciones, Luis Omar Guzmán Juárez, previó que esta reestructuración afectará el mercado energético en múltiples frentes. Es importante recordar que la CRE, fue creada como una unidad de independencia jurídica, que cumple el rol de establecer orden legal tanto en materia de electricidad como de hidrocarburos.
Según el experto, este cambio no es accidental, sino que responde a una nueva visión. «Su autonomía ya no tiene sentido para el gobierno actual, dado que su creación fue calculada con fines neoliberales», subrayó señalando que el papel de la CRE será ahora apoyar de forma directa la estrategia de PEMEX y CFE, los dos gigantes designados como empresas públicas.
Como parte de esta transformación, se espera que las leyes secundarias que regulan a la CFE y a PEMEX entren en vigor en 2025. Estas leyes consolidarán la supremacía de ambas empresas en el mercado, lo que resultará en un “inevitable ocaso de las participaciones de marcas que nunca lograron consolidarse” debido a una sobrerregulación que, en muchos casos, heredaron de administraciones anteriores.
Además, explicó que las marcas extranjeras, particularmente en el ámbito minorista, ya han comenzado a retirarse, y algunas “ondearán la mano en señal de retiro a finales de este año y principios del siguiente”, refiriéndose a aquellas que no lograron adaptarse a las reglas del mercado mexicano.
Desde esta nueva perspectiva, la CRE desempeñará un rol enfocado en el bienestar de la población y en la protección del interés público, con un énfasis en asegurar el suministro de energía a bajo costo. “La nueva gestión estará en función y al servicio de la población, salvaguardando el interés público y cimentando una base sólida para el suministro de energía a precios accesibles”, aseguró Guzmán Juárez.
Sin embargo, advirtió que las oportunidades para empresas que no sean mexicanas y nuevas marcas serán limitadas, dado que las políticas vigentes priorizan la fortaleza y autosuficiencia del sector energético nacional.
La normativa que regirá se volverá más estricta, y las disposiciones administrativas y permisos para operar serán cada vez más exigentes. “Ya no es viable continuar con aligeramientos respecto a la regulación”, sostuvo Guzmán Juárez, quien enfatizó que las empresas que descuiden el cumplimiento de las normativas podrían verse forzadas a retirarse del mercado. De hecho, la pasada sesión ordinaria del Órgano de Gobierno, la CRE no otorgó nuevos permisos de expendio en Estaciones de Servicio, lo cual, refuerza la idea de una política regulatoria cada vez más estricta.
0 comentarios