En los últimos años, el panorama del transporte en el Perú experimentó una transformación, impulsada en gran medida por el Consorcio Camisea y su promoción del Gas Natural Vehicular (GNV).

Esta iniciativa, que busca no solo modernizar el parque automotor del país, sino también reducir las emisiones contaminantes, cobró un impulso que fue reflejado en los últimos informes y cifras proporcionadas por diversas entidades y que Surtidores LATAM recogió.

Según los datos recientes presentados por la Asociación Automotriz del Perú (AAP), la conversión de vehículos a GNV tuvo un gran aumento durante el pasado 2023 con una cifra récord de 457,296 unidades convertidas.

En ese sentido, la alianza estratégica entre el Consorcio Camisea y Cálidda fue clave en este avance. A través del Bono Camisea GNV, se incentiva la adquisición y conversión, proporcionando un financiamiento no reembolsable que facilita el acceso a esta tecnología. 

Según los números oficiales, este programa benefició a más de 140 empresas y más de 530 vehículos, abarcando tanto el transporte de carga pesada como el transporte público.

En esa línea, uno de los momentos más recientes en este camino hacia la adopción masiva del GNV fue la entrega de los primeros 25 tractocamiones a Induamerica Servicios Logísticos, como parte de un plan para aumentar su flota a 120 unidades.

Sin embargo, la infraestructura también obtuvo un crecimiento en los últimos años. Si bien el número de Estaciones de Servicio se mantuvo estable en 341 al término del 2023, según el informe de la AAP, se observó una suba en la oferta de talleres de conversión que van de 243 registrados en 2022 a 295 al cierre del 2023.

“En el Perú, tenemos que aprovechar el gas natural y seguir un poco la agenda de un combustible, que podría decirse de transición”, había mencionado José Carlos Armas, presidente de la Asociación Peruana de Gas Natural y Combustibles Alternativos (APGCNA) a este medio tiempo atrás.