Un vehículo tipo Toyota IST transportaba 940 litros de combustible, los cuales fueron incautados en el puesto de control Vista Alegre, en Villa Hayes debido a que en el lugar se realizaba un operativo policial. 

Los carburantes estaban distribuidos en 31 bidones, sin documentación que respalde su ingreso legal al país. Se estima que el monto de la mercadería rondaba los G. 7 millones. 

Algo similar ocurría al mismo tiempo en la aduana de Trinidad en donde se encontraron 170 litros de nafta, siendo trasladadas de forma ilegal. 

Este no es un conflicto nuevo en la región, pero su problemática se agudiza tras la situación actual, en donde el hidrocarburo se ve encarecido cada vez más por los precios que se manejan a nivel internacional. 

Se estima que a Paraguay ingresan aproximadamente 60 millones de litros de combustibles de manera ilegal todos los meses. Esto sucede debido a que los ciudadanos van a llenar su tanque a las fronteras de Argentina en Posadas o Clorinda. 

Como consecuencia de esto, las Estaciones de Servicio fronterizas están en una situación crítica, muchas de ellas incluso se vieron obligadas a despedir al personal de turno noche, por la baja rentabilidad. 

“Un motocarro está vendiendo más combustible de contrabando que nosotros”, sostuvo Miguel Corrales, actual presidente de la Asociación de Propietarios y Operadores de Estaciones de Servicio y Afines (Apesa) en conversación con Surtidores Latam. 

Los ejemplos son innumerables y la situación se da en todo el país, perjudicando al sector gasolinero paraguayo, llegando al límite de incautar 4 mil litros de combustible en una sola jornada.